Algunos discos que sigo escuchando (2)

 

Tía con Guitarra

Algunos discos que sigo escuchando (2)

De vez en cuando me gusta remover el fondo de las estanterías o rebuscar en los archivos del ordenador o el móvil y pinchar discos que llevan acompañándome poco tiempo (entiéndase unos meses, tal vez un año). Cuando los redescubro, cuando compruebo que esa música se ha quedado para vivir conmigo, con el resto de músicos que ya pueblan mi vida, siento una alegría inmensa. Y de eso trata este artículo, de compartir contigo que aún en estos tiempos de inmediatez, de comida rápida, sexo acelerado y catatonia urbana, podemos recrearnos más allá del viejo clásico o de la novísima novedad para disfrutar de manera más pausada con algunos artistas nuevos, de por aquí la mayoría.

Con estas reflexiones, subo al blog algunos álbumes que por diferentes razones no aparecieron en su momento en el blog pero que, sin duda, debieron. Algunos discos que sigo escuchando pasado el tiempo, perdurables. Habrá más.

 

DesalojoDesalojo – Papeles mojados

A la espera de poder hincar el diente al nuevo trabajo titulado Despierta, repaso este fantástico Papeles mojados. Canciones que rebuscan en el rock más clásico para darle una pátina de siglo XXI y un buen puñado de personalidad, tanto por la voz de Jito como por sus letras, amén de una cuidada producción de Iker Piedrafita (esta vez, acertaste de pleno). Canciones con mucho que decir, como la propia Papeles mojados, la final y casi épica Parte del viento. Las influencias de Randy a la guitarra no se esconden y encuentras muchos guiños; Tras un tren, tremenda. Canciones para cantar a pleno pulmón no faltan tampoco: ahí están A cada instante oír tu voz y A lomos de un susurro. Muchas colaboraciones, demasiadas para mi gusto, y un puñado de canciones que se quedan pegadas. Ahora, a por el siguiente.

 

Caso Omiso – Tarde, mal y nuncaCaso Omiso

Álbum auto-editado hace casi tres años ya, les descubrí hace apenas unos meses. Increíble que estos tipos no hayan conseguido que nadie les publique este pedazo de colección de canciones. Lo cierto es que no hay virtuosismo ni pirotecnia, y la producción llega al aprobado justo. Pero con todo esto, se fabricaron un puñado de canciones que se te pegan. Letras curradas con su punto original, tipos que se entregan en cada riff, en cada compás. Desde el cigarrito con el que abre Por el suelo hasta la final Campo a través. Por el medio, temas importantes como Duermevela, Todo me sale al revés (qué recuerdos a EUKZ) o Ahora que no miento (genial juego de tempos, con tufillo a Kolibrí). En mi opinión, estos cuatro asturianos se merecen un poco más de atención. Y un nuevo álbum pero ya, gente.

Adestono Adestono – Tiempo y castigo

No puede negarse que la voz de Aleka marca mucho del estilo de Adestono, que ellos mismos encajan entre lo más granado del rock patrio. Pero también sería injusto, porque toda la banda suena muy compacta. Buen trabajo de guitarras, con algunos riffs bien conseguidos y la pareja Álvaro y Carlos combinándose con muy buen gusto. Entre los diez cortes del álbum tienes un poco de todo, como siempre para gustos, pero no puedo dejar de tararear Canción de soledad, Alúmbrame o Guerrero del anochecer (guitarra heavy rock clásica, de veras). El ritmo de Luces rotas y Falta de categoría me enganchan. Ese regusto a Iniesta de Anacoreta les acerca al tema perfecto. La caña de Diez y diez. Están de gira aún y seguro que tocan pronto cerca de tu casa, no los pierdas de vista porque nos darán muchas alegrías.

Sacramento – A sangre y fuego sacramento

Desde el principio queda claro que Manuel Escudero se ha marcado un discazo lleno de Rainbow y Deep Purple. No se esconde, pues dos temas van dedicados al mundo púrpura: Cielo púrpura y Black deep rainbow (este último al genial Blackmore). Muchas colaboraciones, se mueve entre riffs bestiales, teclados setenteros, buenos coros y mucha, mucha voz. Katmandú junto con La estrella de David nos pasean por caminos orientales, cada uno en su estilo, con su toque distintivo. Una balada tierna como Pienso en ti, dedicada a un amigo que se suicidó, delicada, bien arreglada. Kamikaze es brutal. En fin, power metal enredado en classic rock, mucho y buen trabajo instrumental y uno de esos discos que no aparecen con frecuencia y del que deberíamos hablar mucho y bien alto.

Y si aún quieres saber qué discos seguimos escuchando, pincha en los otros artículos de esta serie:

Algunos discos que sigo escuchando (1)

4 comentarios en “Algunos discos que sigo escuchando (2)”

  1. El de Sacramento es brutal, tío. ¿Te gusta Alberto Rionda? Creo que disfrutarías de Alquimia, lo último que ha hecho. Por cierto, me suscribo por correo a tu bitácora, que creí haberlo hecho. ¡Saludos! Bueno, qué coño. ¡Un abrazo!

    1. Jaja, gracias por seguir el blog. El de Alberto lo tengo por aquí también y quizá aparezca otro día por esta misma sección. Lo tengo menos escuchado. Te recomiendo, si no lo conoces, el de Mercury Rex. No llega al de Sacramento pero se hace muy entretenido. Un abrazo.

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